RAÚL MARIO CASTAÑO H.
Crispetas

Rey Nacional de la Trova en 1991 y 1995, en el Palacio de Exposiciones y en La Macarena, respectivamente.

Nació en Marinilla donde la buena trova se da silvestre. Trabajador incansable y excelente negociante, herencias también de sus mayores. Ha prometido dejar la trova cuando alce a ahorrar su primer millón de dólares. Es un consuelo saber que va a trovar toda la vida. Es un trovador aguerrido y contestón, y no se le queda callado ni a la esposa.

Crispetas es una perfecta revoltura de juglar pueblerino y coplero citadino, y se defiende en cualquier terreno con especial énfasis en "lo que sea".

En la Plaza Mayorista, donde tiene su negocio de frutas, dicen que Raúl Mario tiene la habilidad natural para calcularle el revuelto a sus contrincantes. Es lo que llamamos los expertos: un gallo de pelea en asuntos de trova, un repentista festivalero.