MÉXICO, D.F. (El Universal) Rescatamos algunos de los dichos y frases más populares que La Academia Mexicana de la Lengua ha recopilado en suRefranero Mexicano que se refieren a ciudades y estados en específico, o a sus habitantes.
Varios refranes tienen un carácter negativo, que se remonta a la época colonial, cuando surgió una cierta rivalidad entre las personas de las diferentes regiones que integraban el País, principalmente debido a cuestiones económicas, políticas y hasta étnicas.
Debemos aclarar que de ninguna manera estamos de acuerdo con los adjetivos peyorativos, sino que tomamos las frases de forma textual.
¿Qué otro dicho conoces sobre algún lugar de México?
De Guanajuato, ni el polvo. Según el refranero, es un dicho peyorativo, que se refiere a que al salir de la entidad, debe sacudirse hasta el polvo que se haya impregnado en los zapatos; la creación de la frase se le adjudica a un religioso franciscano.
Guanajuato nunca pierde, y cuando pierde, arrebata. es una frase local que ensalza a la entidad. También existe una versión para el estado de Jalisco.
De la norteña y la tapatía, la primera tuya, la segunda mía. Se refiere a la famosa belleza de las mujeres de Jalisco que, según el refrán, supera incluso a la de las mujeres del Norte de México.
También hay frases con significados distintos, como En la Huasteca, hasta la yuca destila grasa, que se puede referir a un vegetal o a la abundancia de los platillos que conforman la gastronomía de esta región en Hidalgo, Veracruz y San Luis Potosí.
Al yucateco se le ve y se le oye puede ser positivo o negativo, según se le interprete, ya que puede referirse al carácter festivo de las personas de esta región. Así que Si se acaba el mundo yo me voy para Yucatán.
La mayoría de los dichos peyorativos que se refieren a las personas de un cierto lugar surgieron por pugnas entre etnias distintas. Por ejemplo, Prieto, chaparro, panzón y hablador: oaxaqueño, frase que describe un estereotipo erróneo sobre las personas de Oaxaca.
Lo mismo sucede con Poblano: chicharronero, cortabolsas y embustero. Los refranes de este tipo comenzaron a originarse desde el siglo XVI, debido a que Puebla fue una ciudad muy envidiada gracias a la posición tan importante que tuvo durante la Colonia.
Por esa misma razón, la ciudad de Querétaro no podía quedarse atrás con ¿Queretano camotero?; falso, hipócrita y frailero. Por otro lado, el refrán En Querétaro, al poblano bien puedes darle la mano pone las cosas en otra perspectiva…
Las ciudades del centro tampoco estaban exentas, como dejar constar el siguiente dicho: Toluca la bella: jardín sin flores, ríos sin agua, mujer sin vergüenza y hombre sin palabra. Hay algunas variantes de esta frase.
¡Y qué decir de la Ciudad de México y sus habitantes! Pretencioso, flojo y vano: mexicano. Pero no olvidemos la respuesta de los capitalinos a quienes los insultan: Fuera de México, todo es Cuautitlán.