Autor: Giselle Tatiana Rojas Pérez
10 de Agosto de 2013
Mañana se realizará la versión número 56 del Desfile de Silleteros y sus protagonistas: los silleteros de Santa Elena, ya están ultimando todos los detalles.
Foto: Giuseppe Restrepo
“Así empezó a nacer la innovación en Medellín”, es el concepto que desarrolló Filiberto Ruiz en su silleta emblemática. En la foto está con su esposa, Gloria Chica.
Desde el término de la pasada edición del Desfile de Silleteros, los habitantes de Santa Elena vienen trabajando en las obras con las que saldrán mañana a recorrer nuestra ciudad.
Serán quinientas las silletas que comprenderán el desfile más emblemático que tienen la Feria de las Flores, y en cada una de ellas no solo trabajan los campesinos que las llevan en su espalda durante el recorrido de dos kilómetros y medio, que hace parte del desfile, sino que en su elaboración se involucran todos los miembros de la familia.
En agosto no solo los silleteros recogen sus flores para el desfile, sino que en Santa Elena por esta época, también florece la tradición que hace orgullosa a Antioquia.
Miles de visitantes, algunos nacionales, otros internacionales, y por supuesto, los nacidos en Antioquia, llegan a este corregimiento para conocer en profundidad la tradición silletera y ver cómo se elaboran las silletas, conocer los cultivos y apreciar las flores que nacen en este territorio, además de, deleitarse con la belleza del paisaje del departamento.
Nuestros silleteros no solo llevan a cuesta los 70 o 90 kilos que pesan sus estructuras florales, sino que, también, cargan en sus espaldas la tradición cultural de “nuestros abuelos, quienes nunca se imaginaron lo que hemos logrado con el Desfile de Silleteros y con la propagación de este arte en el país y el mundo”, señaló Carlos Atehortúa, director de la Corporación de Silleteros de Santa Elena.
Ir a Santa Elena y hacer el llamado tour silletero para deleitarse con esta práctica, cada vez es una actividad que congrega a más gente, y se ha convertido en un punto importante para que las familias silleteras inicien a elaborar sus productos.
Andrés Zapata, hijo de un silletero de Santa Elena, relató que los campesinos han optado por convertir el inicio de sus silletas en una actividad abierta al público, con el ánimo de contribuir al acercamiento de este legado antioqueño a la gente que no es proveniente de este corregimiento.
“La elaboración de las silletas es algo que nos gusta compartir a nosotros, porque esto no es solo nuestro, es también de todo el mundo. Sabemos que la gente viene con la intención de conocer más sobre lo que hacemos y nosotros somos muy hospitalarios y nos gusta que vengan hasta nuestras fincas y aprendan de lo que hacemos”, relató.
Cómo se hacen
Los pasos de la construcción de las silletas varían del tipo escultura que se quiera realizar.
José Ángel Zapata, silletero tradicional, detalló que para elaborar sus silletas comienza por el andamio o la caja tradicional que se utiliza en este tipo de silletas. Luego, se seleccionan las flores, que para esta categoría son utilizadas en ramilletes de aproximadamente 15 flores.
Detalló que el truco para que a estas se les vea frescas por varios días, es mojarlas en su totalidad a la hora de construirlas, “ya cuando están listas, ellas mismas se alimentan y se ayudan entre sí a conservarse, esto permite que duren de mes a mes y medio”, dijo.
Las silletas monumentales se caracterizan por su colorido y por la variedad de flores existentes en ellas. Utilizan hasta cincuenta ramilletes de especies florales que nacen en los cultivos de Santa Elena.
Una buena silleta para José Ángel Zapata debe tener más de treinta variedades de flores.
Otra de las silletas es la emblemática, que pueden ser en alto relieve o plana. “Requiere de más tiempo en su elaboración y por lo general es utilizada para exaltar lo más bello que tenemos en Antioquia”, expresó Martín Atehortúa.
Para este tipo de estructura silletera se requiere de una elaboración previa del diseño, que luego debe ser dibujado en cartón y así empezar a elaborar las partes que serán cubiertas por flores.
Otros tipos de silleta son la monumental, que lleva las flores individuales y no en ramilletes como las tradicionales, y las comerciales, que como su nombre lo dice las utilizan las empresas para comercializar sus productos.
Los mensajes
Desde el primer desfile de silleteros que se hizo en Medellín, en 1957, esta práctica antioqueña se ha sido utilizada no solo para exaltar la cultura nuestra, sino que también se le han introducido detalles que las han convertido en elementos más llamativos.
José Ángel Zapata recordó que cuando era niño las silletas no eran tan elaboradas, y que las que más se utilizaban eran las tradicionales. Para él, la evolución de las silletas ha permitido que se explote más la creatividad de estos artesanos de las flores y a su vez le ha dado al desfile la posibilidad de darle un mayor espectáculo al público.
Los silleteros coinciden en afirmar que la creatividad es el punto de partida de una silleta, “pues la gente encuentra en el diseño el punto atractivo de esta”, opinó Martín Atehortúa, quien detalló que le gusta tratar temas de actualidad en sus silletas emblemáticas. “Le apuesto a los temas de lo que la gente está hablando. Por ejemplo, mi silleta consiste en una representación muy fiel de los símbolos que creo que son los más conocidos que tiene Antioquia, a propósito de su bicentenario”, precisó.
Sin embargo, hay muchos silleteros que prefieren no utilizar mensajes en sus diseños, esto ocurre especialmente en las silletas monumentales.
Aunque, como lo explicó Filiberto Ruiz, lo importante “de una buena silleta no está en lo que el silletero quiere decir en ella, sino en lo que la gente sienta y piense cuando ve estos preciosos arreglos florales”.